La Reserva Federal dio a conocer un nuevo incremento de 75 puntos básicos en los tipos de interés hasta el rango comprendido entre 3,75% y 4%, como parte de sus esfuerzos por controlar la inflación. Sobre este particular, la determinación del banco central cumplió con las expectativas del mercado y añade presiones adicionales al aparato productivo estadounidense de cara a la temporada de fin de año. 

De acuerdo con la Fed, el nivel general de precios permanece siendo elevado ante los desequilibrios de la oferta y la demanda relacionados con la pandemia del covid-19, así como el encarecimiento de los precios de los alimentos y la energía. Adicionalmente, se enfatizó en que las tensiones geopolíticas entre Rusia y Ucrania siguen influyendo en los esfuerzos de la política monetaria, sobresaliendo como un factor por considerar en la lucha contra la inflación registrada en los últimos meses. 

En su comunicado de prensa, el Comité Federal de Mercado Abierto reveló su disposición a continuar realizando nuevas subidas en el rango de intervención de la tasa de interés, con el objetivo de redireccionar la política monetaria hacia un modelo contractivo. Esto se debe a que los mayores intereses aumentan el costo de los préstamos, ocasionando menores incentivos al gasto de los consumidores, al tiempo que, desacelera decisiones de inversión y los planes de expansión en las empresas. 

No obstante, la Reserva Federal dio señales de incrementos más moderados con referencia a las próximas reuniones, luego de puntualizarse que se tendrá en cuenta endurecimiento acumulado de la política monetaria sobre la actividad económica y el sistema financiero. A su vez, hubo énfasis en la reducción de las tenencias de valores del Tesoro y los valores respaldados en hipotecas, que inició en mayo a un ritmo inicial mensual combinado de US$47.500 millones, con alzas graduales de US$95.000 millones cada tres meses.  Leer más.