Rico, saludable y sustentable: la búsqueda de productos que combinen estos atributos está modificando las decisiones de compra y el negocio; las empresa innovan para renovar sus fórmulas.

Nuevos hábitos de los consumidores obligaron a las empresas de la industria alimenticia a modificar no solo las carteras, las recetas y el modo de elaborar los productos, sino también la forma de gestionar los negocios. En un contexto en el que entra también en juego la Ley de Etiquetado Frontal, que obliga a las compañías a informar sobre la calidad de los alimentos mediante sellos octogonales en el packaging, ¿cuáles son las tendencias y qué están haciendo los principales jugadores del segmento para aggiornarse?

De acuerdo con el informe Menús del Futuro, diseñado por Unilever Food Solutions, las cocinas de los chefs en la Argentina se ven atravesadas fundamentalmente por tres tendencias, que hacen foco en el equilibrio entre el sabor y la nutrición, a la vez que en el impacto ambiental. Según el documento, los vegetales se convirtieron en protagonistas, mientras que la cultura de compartir un plato y la preocupación por reducir los desperdicios ganan preponderancia.

Estas tendencias hacen eje en tres datos no menores. Un reporte presentado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), en 2022, concluyó que casi el 5% de los productos frescos, perecederos y de almacén en autoservicios y supermercados de la Argentina termina en la basura, lo que equivale a 123.000 toneladas anuales. En otro orden, un informe de la Unión Vegana de Argentina (2020) afirmó que el 12% de la población es vegana o vegetariana; y según la FAO, se prevé que, para 2030, las ventas minoristas de alimentos a base de plantas quintupliquen las de 2020 y alcancen los US$162.000 millones. Leer más.

Imagen recuperada de: La Nación